El TSXG da marcha atrás y propone un juzgado de lo Social para Vigo


14 jul 2011


El tribunal rectifica, tras eludir la dotación en su memoria, y la incluye en lugar del Juzgado de Violencia de Ourense. La memoria del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia en la que no se demandaba la creación del juzgado de lo Social número 6 para Vigo, una de las necesidades más urgentes para la ciudad, cayó como un jarro de agua fría.
Publicado en www.atlantico.net


El tribunal rectifica, tras eludir la dotación en su memoria, y la incluye en lugar del Juzgado de Violencia de Ourense


La memoria del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia en la que no se demandaba la creación del juzgado de lo Social número 6 para Vigo, una de las necesidades más urgentes para la ciudad, cayó como un jarro de agua fría.

Los jueces vigueses se mostraban sorprendidos pero seguían confiando en que la Comisión Mixta (formada por el TSXG y la Xunta) apoyaría esta reivindicación.

Finalmente así ha sido. Desde el alto tribunal gallego se envió ayer una “aclaración” en la que se rectifica la postura sobre la propuesta inicial de la memoria respecto a las necesidades de órganos urgentes. En dicha aclaración se da marcha atrás y se incluye en la lista definitiva aprobada por la Comisión Mixta, además del nuevo magistrado para la sección sexta de la Audiencia, el Juzgado número 6 de lo Social de Vigo.

La lista mantiene el mismo número de órganos que en la memoria inicial pero sustituye el de Vigo por el Juzgado de Violencia de Género de Ourense, que deja de estar incluido como propuestas para este año, a pesar de haber sido mencionado en un principio como órgano de creación de urgente necesidad.

Aunque no se ha dado ninguna explicación oficial sobre cuáles han sido las razones de esta rectificación, todo apunta a que no se trató de un simple error sino que viene motivado por una decisión todavía no aclarada de rechazar la creación de más juzgados de Violencia en Galicia, que sólo cuenta en la actualidad con órganos en Vigo y A Coruña. Mientras el BNG había denunciado que fue la Xunta la que consideró que no había necesidad de estos órganos, el propio gobierno autonómico aseguraba que fue responsabilidad del Ministerio de Justicia.

Sea cual sea la causa, Vigo respira más tranquila al optar de nuevo a un juzgado que ya había perdido el año pasado en favor de Pontevedra, a pesar de la elevada carga de trabajo de los juzgados vigueses y del enorme esfuerzo de los titulares de estos órganos por evitar una pendencia peligrosa pese al descabellado número de asuntos que ingresan a consecuencia de la crisis económica.

La suerte está en manos del Ministerio de Justicia que debe dar el visto bueno a la propuesta de la Comisión Mixta, aunque en el caso de Vigo hay un informe favorable por parte del Consejo General del Poder Judicial para contar con este nuevo órgano judicial, que deberá estar listo antes del 31 de diciembre.

Los datos referentes al año 2010 y que fueron presentados por el TSXG reflejan que el número de asuntos pendientes se incrementó respecto a 2009 en los juzgados de lo Social pasando de los 2.259 a los 2.369, insistiendo en que la pendencia, no obstante no es de las más destacadas de Galicia principalmente por el elevado porcentaje de resolución en los cinco órganos con los que actualmente se trabaja en Vigo.

La Xunta tendrá que buscar locales

A pesar del alivio que ha supuesto esta rectificación en el sector judicial vigués, la decisión de crear el Juzgado de lo Social número 6 no está exenta de obstáculos. De ser corroborada oficialmente (todo apunta a que así será tras pasar el filtro de la Comisión Mixta) se presenta ahora el problema de espacio.

La alternativa de la Xunta ante el bloqueo de la Ciudad de la Justicia ha sido el traslado del Registro Civil al Casco Vello. No obstante, las obras del nuevo inmueble no estarán operativas hasta el año próximo, lo que impedirá tener espacio libre en la calle Lalín antes del 31 de diciembre, fecha en la que deberá estar en marcha el órgano de nueva creación.

Ante esta situación, la Xunta se verá obligada a buscar locales, algo que ya reconoció el conselleiro de la Presidencia, Alfonso Rueda, durante su visita a Vigo.

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El Tribunal Superior rectifica y pide crear otro juzgado laboral


Los jueces de lo Social de Vigo son los que dictan más sentencias de Galicia

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) rectificó ayer y confirmó oficialmente que va a recomendar la creación en Vigo del juzgado de lo Social número 6 de Vigo. Esta propuesta, que se daba por sentada hace meses, no figuraba en la memoria del 2010 que el alto órgano aprobó en el pleno y publicó la semana pasada. Sin embargo, el TSXG difundió ayer una adenda en la que rectifica e incorpora como órgano de necesaria creación el sexto Social de Vigo. El pasado 20 de mayo, el presidente del TSXG, Miguel Ángel Cádenas, había solicitado otro juzgado social en Vigo, tras el acto de doble condecoración del decano de los abogados, Álvarez Gándara. Justificaba la creación por la «gran demanda de justicia social» en la ciudad.

Los cinco juzgados que tramitan los despidos, las reclamaciones de Seguridad Social, invalideces o indemnizaciones han visto aumentar su número de casos un 44%, de los 4.487 a los 6.058 desde que empezó la crisis en el 2007. En apenas cuatro años, deben hacer frente, con los mismos recursos, a 1.930 pleitos más, lo que equivale al trabajo de un juzgado durante un año. En el 2007 entraba una media de 873 casos por juez y ahora 1.259. Solo los dos tribunales de Santiago reciben más demandas laborales que Vigo.

A pesar del aumento de la carga de trabajo, los jueces han dictado la cifra récord de 6.058 sentencias, lo que convierte a tres jueces laborales de Vigo en los más productivos de Galicia. Abogados laboralistas han elogiado el esfuerzo de los magistrados vigueses para llevar los asuntos al día porque las demandas por despido deben ser resueltas en dos meses por ley pero la mayoría de los tribunales gallegos e incluso de las grandes capitales van con retraso. A principios de año, el juez del número 1 llegó a celebrar juicios el 3 de enero, en plenas vacaciones, para cumplir los plazos.

Aumenta la conflictividad

El número de pleitos relacionados con reclamaciones que hacen los trabajadores a las empresas no paran de crecer. Entre enero y junio del 2010, los juzgados tramitaron 627 despidos conflictivos y este año 630. Antes de la crisis, había 700 juicios por despido en un año.

Los pleitos por disconformidad en las cantidades percibidas por el trabajador pasaron de 963 a 1.026 en un año, lo que supone un aumento del 6,5%. En el 2007, estas cifras eran las normales para todo el ejercicio y ahora solo suponen medio año.

Las demandas de los empleados que están en desacuerdo con el período cotizado se elevaron de 71 a 90, lo que supone un incremento del 26,7%, y las peticiones de invalidez pasaron de 224 a 298, lo que equivale a un 33% más. Otras actividades, como los procedimientos en los que la empresa consigna el dinero exacto que debe al trabajador para evitar pagar los intereses del salario de tramitación de un despido han caído de 220 a 183.

Los más eficientes

Los magistrados han podido poner al día 241 asuntos de los 6.297 que entraron este año, lo que supone que han resuelto el 96% del trabajo. El problema es que tienen otros 1.886 asuntos heredados del 2009, una auténtica bola de nieve. Al principio de la crisis, tenían 1.315 pendientes.

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) reconoció en el 2009 que Vigo estaba sobrecargado y envió un juez de refuerzo para ayudar a sacar adelante el trabajo. El juzgado de lo Social número 3 fue el más eficiente de Galicia en su especialidad, tras dictar 1.258 sentencias en un año. Le sigue el número 1 de A Coruña y los juzgados 1 y 5 de Vigo, que ocupan los lugares tercero y cuarto del ránking. El número 5 de Vigo es el cuarto de los 26 tribunales gallegos que acumula menos sentencias pendientes, solo 305. Nada tiene que ver con los 2.000 asuntos atrasados en salas de A Coruña o Santiago. Pese a ello, el número de casos atrasados se disparó un 54% desde el 2007, al pasar de 1.195 casos a 1.841 asuntos, el trabajo anual de un juez.

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