Publicado en www.diariodeferrol.com
Los funcionarios de los juzgados de Ferrol tienen programada una movilización que se llevará a cabo la próxima semana para protestar por la falta de funcionamiento del ascensor del edificio antiguo, que lleva más de un año sin uso. Este hecho provoca que tanto los ciudadanos como los profesionales de la Justicia tengan que utilizar las escaleras para llegar a la quinta planta, en la que se encuentran el Juzgado de Instrucción número 3 y la Fiscalía, con el consiguiente problema para las personas de movilidad reducida y también para los funcionarios que tienen que utilizan carritos para el traslado de documentos.
La falta de ascensor supone, asimismo, un inconveniente en el traslado de detenidos, que tiene que realizarse por las escaleras.
El equipo no funciona desde que se iniciaron las obras de mejora del Palacio de Justicia de Ferrol, en abril de 2010, y en las que la Xunta invierte 2,2 millones de euros.
Lo lamentable de la situación, en opinión de los funcionarios y de sus representantes sindicales de Comisiones Obreras, es que el ascensor ya está en condiciones de ser utilizado desde hace muchos meses, pero la empresa que realizó los trabajos no lo legaliza y, por lo tanto, no se puede poner en funcionamiento porque todavía no cobró. El problema radica en que quien subcontrató la obra fue la anterior adjudicataria de la reforma de los juzgados, Feyju Galicia, que abandonó las obras en diciembre de 2010 y en la actualidad está en concurso de acreedores.
Relevo
Este mismo hecho fue el que propició un importante retraso en la realización de las intervenciones en el conjunto de la obra, que finalmente se solventó al recoger el testigo de la contrata la firma En Sigras Piedras, que ya está a punto de finalizar los trabajos. Así, el tejado, que pasó varios meses cubierto por una lona, ya está finalizado, al igual que las obras de renovación de los diferentes juzgados y oficinas, que ya se encuentran reubicados en su totalidad.
En el caso de la cubierta, se solventaron también los problemas de corrosión que se habían detectado en las vigas del techo de la última planta del edificio antiguo.
De hecho, el viernes se inició el traslado del Servicio Común de Notificaciones para su emplazamiento definitivo.
Entre los remates que quedan pendientes en el interior figuran los accesos desde la calle a las dependencias de la planta sótano en las que se instalará el juzgado de guardia, así como el acondicionamiento de la biblioteca. Lo que sí resta por acometer es la renovación completa de la fachada.
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