El Tribunal Superior pide una sanción para un juez de Lleida que criticó el uso del catalán


21 may 2011


Publicado en www.elpais.com

20-05-2011. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha calificado de falta "grave o muy grave" el contenido de diversas resoluciones dictadas por el magistrado José María Aristóteles Magán Perales, titular del único juzgado contencioso administrativo de Lleida, en las que critica el uso del catalán en los juzgados. El TSJC ha elevado el expediente abierto contra el juez a la comisión disciplinaría del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para que resuelva la propuesta de sanción, que podría consistir en una multa o en la separación del servicio.

El TSJC abrió en abril un expediente contra Magán tras recibir una carta del presidente de la Audiencia de Lleida en la que informaba de las quejas presentadas por profesionales del derecho, (la Generalitat, el Ayuntamiento y la Diputación de Lleida) por algunas de sus resoluciones "no ajustadas a una correcta praxis profesional". La consejera de Justicia, Pilar Fernández Bozal, también instó a tomar medidas contra el juez.

De entre todas las resoluciones del juez la más polémica fue una interlocutoria en la que consideraba una "falta de respeto y mínima educación" que los abogados de la Generalitat utilicen la lengua catalana en los juzgados en asuntos que afecten a personas de otras comunidades. El magistrado, que tiene reconocido en su currículo como mérito sus conocimientos de catalán, utiliza el castellano para los topónimos locales y se refiere a la Generalitat como "Administración regional".

Los desencuentros entre Magán y la Administración catalana han sido constantes. En otra resolución sobre un recurso por una multa de tráfico, advirtió a la Generalitat que no podía cobrarla antes de concluir el trámite de alegaciones, cuestionó su solvencia económica y la acusó de actuar con un "repudiable" afán recaudatorio. En otra sentencia comparó el litigio del arte sacro con la diócesis de Barbastro-Monzón con los papeles de Salamanca, lo que provocó las iras de los miembros del Consorcio del Museo Diocesano y Comarcal de Lleida.

Enlace permanente