Los juzgados gallegos, entre los más saturados de España, reciben 39 euros por ciudadano
R. PRIETO - A CORUÑA Menos que lo que cuesta llenar el depósito de combustible de un turismo. Eso es lo que invirtió la Xunta en 2011 por habitante en Justicia: 39 euros, 5,47 menos que los 44,47 euros del año anterior. Esta cantidad convierte a la Administración gallega en la que menos presupuesto reservó en 2010 para la mejora de sus órganos judiciales. Junto con Galicia, la Comunidad Valenciana (46,1 euros), Andalucía (48,2) y Aragón (49,5) están a la cola en inversión por habitante en esta materia. En el extremo opuesto, se hallan País Vasco y Cataluña, que superaron los 70 euros por habitante, 15 por encima de la media nacional.
Pese a que en 2010 la Xunta excluyó el ámbito judicial del tijeretazo presupuestario, el año pasado los recortes y la austeridad sí le pasaron factura. En total, el Ejecutivo de Feijóo destinó poco más de 109 millones de euros a la Administración judicial, lo que supone un 12,4% menos que en 2010, según recoge el informe "La justicia dato a dato", del Consejo General del Poder Judicial. Un balance que triplica la media de los recortes aplicados en otras comunidades (-4,3%) y la convierte en la cuarta autonomía que más metió la tijera a las partidas en materia judicial, solo por detrás de Asturias (-16,7%). Navarra (-16,1) y Cantabria (-16). La inversión del año pasado en Justicia contrasta con la de 2010, que en Galicia fue de 124,42 millones, lo que supuso un 15,2% más que en 2009.
¿En qué se gasta ese dinero? En las nóminas de los funcionarios, los nuevos equipos, la construcción de edificios judiciales y, en especial, en la Justicia gratuita. Casi un 10% de la partida presupuestaria reservada para esta materia por la Xunta es para sufragar el turno de oficio: un total de 10 millones de euros, lo mismo que en 2010. Salvo en cinco comunidades –en Andalucía, Navarra y País Vasco se aumentó el presupuesto para los abogados de oficio y en Asturias y Cataluña se rebajó– en el resto se mantuvieron las mismas inversiones que en 2009.
En cuanto a los casos pendientes, los juzgados gallegos los reducen por primera vez en siete años. La litigiosidad en la comunidad cayó un 1,4% en 2011 y los juzgados resolvieron más asuntos de los que ingresaron. Galicia cerró el año pasado poco más de 174.000 expedientes a la espera de resolución judicial, un 5,2% menos que en 2010. Pese a este balance, la tasa de congestión de los órganos judiciales gallegos está por encima de la media, un 1,4 frente al 1,3 nacional. Un índice de saturación que coincide con el de Baleares y Comunidad Valenciana y está tan solo un 0,1 por debajo de la tasa de congestión de Castilla-La Mancha y Murcia (1,5).
Publicado o 18/07/2012 en www.farodevigo.es
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