10.10.2011.- El consejero de Economía del Gobierno de Aragón, Mario Garcés, anunció en los medios de comunicación la decisión de amortizar 202 plazas de empleo público en la Administración Autonómica. Para CCOO la medida lo que muestra es "falta de confianza y determinación en la defensa de los servicios públicos".
Se reproduce a continuación el comunicado emitido por la Sección Sindical de CCOO en la Diputación General de Aragón (DGA) sobre el anuncio de las mencionadas amortizaciones:
"El consejero más mediático de la historia del Gobierno de Aragón, Mario Garcés, ha trasladado a los medios de comunicación la decisión de amortizar 202 plazas de empleo público. Una vez más, los representantes de los trabajadores y trabajadoras han recibido la noticia gracias al buen hacer de la ediciones digitales de los periódicos.
El criterio principal utilizado para amortizar esas 202 plazas ha sido que los puestos de trabajo perdidos no son ni de médico ni de maestro. La guadaña ha cortado los puestos que llevaban sin cubrir más de 18 meses, como se puede ver los principios de eficacia, eficiencia, coordinación y planificación que rigen en las Administraciones Públicas se han satisfecho una vez más. Todo ello dando cumplimiento al principio de publicidad.
Cuando los focos y los micrófonos se apagan el consejero vuelve a su faena, que no es otra que adelgazar la administración cueste lo que cueste. Sólo así se puede explicar que esos 202 puestos de trabajo amortizados incluyan plazas de cocina en residencias del IASS o personal de carreteras destinado a la conservación de las mismas. Sólo así se puede explicar que el consejero continúe entretenido señalando la siguiente tanda de amortizaciones, que según sus palabras rondará el 40% de vacantes no ocupadas, es decir, más de 250 plazas; que en todo caso para tranquilidad de la sociedad aragonesa no serán ni de médico ni de maestro.
Si el anterior Gobierno marcó la senda en la política de personal de la Administración Autonómica, el nuevo Gobierno remata la faena. Si durante los dos últimos años la Ley de Presupuestos no permitía cubrir una vacante, ahora se decide hacer desparecer definitivamente esas vacantes. Antes no hubo criterio técnico ni planificación, ahora tampoco. Antes nadie planteó la posibilidad de qué necesidades nuevas había que cubrir, ahora tampoco. Antes nadie planteó la posibilidad de revertir servicios privatizados a un coste muy superior al prestado por empleados públicos, ahora tampoco. En definitiva, antes nadie apostó por el empleo público, ahora tampoco. Sólo importa cuadrar cuentas porque el fin de año se acerca.
CCOO, antes y ahora, defiende el empleo público. Aquí no sobra nadie. En todo caso, lo que falta es confianza y determinación en la defensa de los servicios públicos. Si el Gobierno necesita quien se lo explique puede contar con 11.212 voluntarios. 11.212 trabajadores y trabajadoras del Gobierno de Aragón".
