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Varela Agrelo jura su cargo |
El nuevo presidente de la Audiencia Provincial, José Antonio Varela Agrelo, tomó ayer posesión de su puesto con un discurso en el que dejó patente una concepción de la figura del juez que avanza un significativo cambio en el perfil social que hasta ahora habían mostrado sus antecesores en este cargo. El magistrado adquirió un compromiso con una Justicia por y para la sociedad que es su destinataria, para lo que reclamó un modelo de ejercer la judicatura alejada de divismos y egoismos y pegada a la realidad de cada momento.
Frente a otros presidentes de la Audiencia que optaron por un perfil público más contenido y menos reivindicativo, Varela Agrelo si ni siquiera dio tiempo a su toma de posesión cuando ya había aprovechado sus intervenciones públicas para poner sobre la mesa peticiones de más juzgados y medios para la provincia.
Pero es probablemente en su forma de entender la función judicial donde las diferencias pueden quedar más patentes. «Cuando alguien asume un cargo público debe de considerarse propiedad pública», señaló citando a Thomas Jefferson, para incidir luego en la necesidad de aplicar la ley bajo «una concepción humanista y del razonamiento jurídico desde postulados ético-sociales que al aplicar la norma integrando las circunstancias de una concreta realidad social (...) reconcilian a muchos ciudadanos con el sistema».
El nuevo presidente de la Audiencia abogó por una judicatura que dé respuesta a los ciudadanos «en un plazo razonable» y lo haga de una manera «comprensible» para los mismos en el uso del lenguaje, algo que sitúa en el ejercicio de «una elemental cortesía de la inteligencia».
«Si hacer justicia es algo más que aplicar la ley», añadió Varela Agrelo, «necesitamos jueces y fiscales que no sólo tengan conocimientos jurídicos, sino también experiencias vitales, madurez y sentido común. Jueces empapados de realidad y de los principios y valores constitucionales que administren el importante poder que se les confiere, dejando a la puerta del juzgado sus particulares creencias ideológicas, religiosas o culturales».
Tras ello, situó la modernización de la Justicia y la implantación de la nueva oficina judicial y los tribunales de instancia como los grandes retos para el futuro inmediato. Para ello, aseguró, cuenta con el apoyo de unos compañeros y unos funcionarios cuyo trabajo hasta el momento calificó de «ejemplar» y de los que se siente «orgulloso».
Varela Agrelo, que no pudo ocultar en algunos momentos del acto su nerviosismo, dejó para el final la parte más emotiva, la dedicada a sus amigos y a su familia. El nerviosismo estuvo a punto de romper en lágrimas cuando citó a su mujer y a sus tres hijos, todos ellos presentes para darle apoyo en un día que el protagonista definió como «feliz».
UNA EXHIBICIÓN DE PUÑETAS
José Antonio Varela Agrelo tomó ayer posesión de su cargo en un acto que, pese a estar revestido de solemnidad, resultó bastante cercano y sencillo. Más de un centenar de personas arroparon en la Audiencia Provincial al nuevo presidente. Como es normal, resaltaron por su número los representantes de los diferentes ámbitos de la Justicia, vistiendo sus características togas negras con las puñetas de las bocamangas como única concesión a la fantasía.
La toma de posesión estuvo encabezada por el presidente del Tribunal Superior de Xustiza, Miguel Ángel Cadenas, acompañado por todos los miembros de la sala de gobierno del alto tribunal. Como padrino del acto -el responsable de salir a buscar a Varela Agrelo y presentarlo a la sala antes del juramento- actuó Manuel Almenar, vocal del Consejo General del Poder Judicial.
Ocupaban sitio de honor la mayor parte de los jueces de los juzgados y la Audiencia de Lugo, encabezados por el juez decano, Darío Reigosa. Junto a ellos, el fiscal superior de Galicia, Carlos Varela, y el de Lugo, Javier Rey, así como los representantes de los colegios profesionales de abogados, procuradores y graduados sociales.
El listado de autoridades políticas incluyó, entre otros, al subdelegado del Gobierno, José Vázquez Portomeñe; director xeral de Xustiza de la Xunta, Juan José Martín; a la delegada de la Xunta, Raquel Arias; al presidente del Consello Galego de Relaccións laborais, Demetrio Fernández; al presidente de la Diputación, José Ramón Gómez Besteiro; alcalde de Lugo, José López Orozco; el parlamentario del PP Joaquín García Díez; el senador socialista Luis Ángel Lago Lage; el portavoz del PP en el Concello, Jaime Castiñeira; y al concejal del BNG Xosé Anxo Lage.
También acudieron altos mandos de los cuerpos de seguridad del Estado y del Ejército, así como representantes de todos los ámbitos de la sociedad lucense: Mauro Varela, Pedro García Herradón, Eduardo Núñez Torrón, Hipólito Trinidad, Blanca García Montenegro; Guillermo Sánchez Vilariño; Julio Padilla, y Benigno Sánchez, entre otros muchos.
Varela Agrelo contó además con el apoyo de un buen número de familiares y amigos en un acto que finalizó con todos compartiendo un vino español en la última planta de la Audiencia.
TEMAS PENDIENTES. Varela Agrelo espera que acabe antes de julio la instrucción del Caso Carioca
* José Antonio Varela Agrelo, en una improvisada comparecencia ante la prensa antes de su toma de posesión, respondió a varias preguntas relacionadas con asuntos que marcan la actualidad judicial en Lugo, entre ellos el polémico caso Carioca. Al respecto, el presidente de la Audiencia expresó su confianza en que la instrucción finalice en el primer semestre del año y pueda abrirse vista oral, aunque reconoció que no tiene la información necesaria como para poder precisarlo.
* No obstante, incidió en su respeto a la independencia de la jueza instructora y señaló que su trabajo como presidente de la Audiencia debe limitarse a «apoyar» con medios materiales ésta y otras investigaciones «para que se puedan resolver en un tiempo razonable», teniendo en cuenta que las personas afectadas pueden estar «en una situación complicada de espera».
* Presidente del TSXG. También compareció ante los medios el presidente del TSXG, Miguel Ángel Cadenas, quien alabó la figura y la trayectoria profesional sólida de José Antonio Varela Agrelo.
* Por otro lado, Cadenas admitió que existen «problemas de infraestructuras» en la Justicia gallega. «Y cuando hablo de infraestructuras», aclaró, «no solo habló de edificios, estoy hablando también de instrumentos, de instrumentos informáticos y de todo tipo para afrontar los problemas que trae consigo la implantación de la nueva oficina judicial, que exige una readaptación de locales».
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